Qué es el perfil opositor
Quiero empezar mis entradas en el blog, un proyecto del que llevo detrás mucho tiempo, comentando el perfil opositor.
Normalmente me consultan muchos alumnos la cuestión de que en algunas academias les indican que tienen un perfil opositor excelente para comenzar a preparar una oposición y que en breve espacio de tiempo pueden conseguir una plaza.
Pongamos luces sobre las sombras sobre el perfil opositor
En primer lugar, desechemos la opción del perfil opositor. Toda persona tiene perfil opositor. No existe unos estándares que nos indiquen si una persona tiene las mejores cualidades para opositar o no las tiene. Lo que deberíamos preguntarnos es si su perfil se ajusta más a una oposición o a otra de rango diferente.
Lo que tenemos claro a día de hoy es que existen perfiles de personas totalmente diferentes. Hay personas que nacen con mayor capacidad para el cálculo abstracto, personas que lo hacen para el arte y el diseño, personas que nacen con una inclinación clara hacia el derecho y personas que nacen con multitud de cualidades excelentes y diferentes.
Lo que no podemos valorar es si tienen perfil opositor o no, ya que cada persona está totalmente capacitada para estudiar una oposición y conseguir la plaza que se merece. Aquello que podemos evaluar es si por sus condiciones, cualidades y diferentes variables son más aptos para estudiar una u otra. Aquí sí se merece que evaluemos esos perfiles pero desde luego una persona está totalmente capacitada para conseguir lo que se proponga y si entre estos objetivos, está la opción de una oposición, también.
4 sugerencias para un perfil opositor
Si quiere saber si tu perfil encaja en una oposición o en otra, debes tener lo siguiente en cuenta:
- Tiempo de estudio. Si el tiempo que le puedes dedicar a la oposición no es más de 2 o 3 horas al día, deberías preparar alguna oposición que tenga carácter local o provincial ya que los temarios no serán tan densos como los de las oposiciones estatales. En cambio, si dispones de más de 4 horas al día, es muy probable que puedas optar por acceder a oposiciones de categorías más amplias como la AGE o Justicia e intentarlo por ahí.
- Movilidad. Si no te importa moverte de tu ciudad… enhorabuena! tus posibilidades acaban de ampliarse muchísimo. En este caso, podrías optar por escoger oposiciones libres (aquellas que sólo dependen de tu nota) y por tanto podrías quedarte con una plaza en primera convocatoria. Eso sí, depende de la nota veríamos el destino. Un ejemplo de esto es la AGE.
- Trabajo. ¿estás trabajado? Sí tu respuesta es positiva, bien… eso es bueno pero… ten en cuenta el tiempo que te va a dejar para estudiar y sobre todo el cómo vas a estar cuando te pongas a estudiar. Si estás muy cansada o muy cansado, tu rendimiento bajará alarmantemente.
- Base de estudios. No es lo mismo preparar una oposición con el graduado en ESO que con una carrera universitaria. Es decir, la base de estudio siempre será mayor en el segundo caso y por tanto eso te puede ayudar a asimilar mejor los conceptos.
En resumen, todos tenemos perfil opositor pero sí debemos tener en cuenta a que entidad nos vamos a dirigir (si va a ser entidades locales, universidades, cuerpos de seguridad del Estado, AGE, Justicia…) y por su puesto si mis variables (antes mencionadas) coinciden con lo que quiero estudiar.
Por lo tanto, si tienes claro cuál es tu realidad frente al mundo de las oposiciones, esto te permitirá elegir mejor tu destino y por tanto tener más posibilidades de éxito a la hora de conseguir lo que tantos buscan: una plaza de funcionario.